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Tipos de medusas más venenosas del Mediterráneo

Tipos de medusas más venenosas del Mediterráneo

Tipos de medusas más venenosas del Mediterráneo

¿Sabías que existen más de 4.000 tipos de medusas en el mundo? Te explicamos qué especies puedes encontrar en el Mar Mediterráneo y qué grado de peligrosidad tienen.

En los últimos años, la llegada de este animal gelatinoso a nuestras costas ha aumentado considerablemente. Especialmente en aguas del Mediterráneo y del Mar Menor ¿A qué se debe este incremento de avistamientos? Según los expertos, se produce principalmente por la sobrepesca y su consecuente disminución de poblaciones de peces. La contaminación y el calentamiento del agua son otros factores que también favorecen la aparición cada vez más temprana y abundante de estas “descerebradas”.

A continuación, detallamos las clases de medusas que proliferan en las costas españolas y las consecuencias de sus picaduras.

Especies de medusas del Mediterráneo y efectos de sus picaduras

Tipos de medusas menos peligrosas

Cotylorhiza tuberculata

Tipos de medusa Cotylorhiza tuberculata

Entre los diferentes tipos de medusas del Mediterráneo, destacamos por su abundancia la especie Cotylorhiza tuberculata. Pertenece a la clase Scyphozoa, orden Rhizostomeae y familia Cepheidae. Se conoce popularmente como aguacajada, medusa huevo frito o acalefo.

Se caracteriza por su peculiar morfología, en línea con uno de sus motes “medusa huevo frito”. Su sombrilla es aplanada, de color marrón amarillento y algún tono verdoso. Que varía en función de las algas que viven en su interior. Y con una destacada protuberancia central pardo anaranjada.

El diámetro de su umbrela es de 20 a 35 centímetros. Tiene 8 brazos orales cubiertos de apéndices a modo de pequeños tentáculos con el extremo en forma de botón blanco.

El acalefo se puede encontrar tanto en aguas abiertas como en la costa. Están sujetas a las corrientes y vientos dominantes, aunque tiene capacidad para desplazarse por si misma. Es muy común en el Mediterráneo durante el verano y el otoño. Especialmente abundante en el Mar Menor. En invierno sobrevive en forma de pólipo.

¿La picadura de la medusa huevo frito es peligrosa? Su capacidad para producir urticaria es limitada, por lo que podemos concluir que su peligrosidad es baja. Sus tentáculos son cortos y la densidad de sus células urticantes es escasa. En caso de picadura, sus efectos son muy leves, no pasando de la irritación de la piel y el picor.

Rhizostoma pulmo

Tipos de medusa Rhizostoma pulmo

De la clase Scyphozpa, orden Rhizostomeae y familia Rhizostomatidae. También es conocida bajo los nombres de aguamala, aguaviva, acalefo azul y medusa blanca.

El diámetro de su umbrela puede llegar hasta los 100 centímetros. Se caracteriza por una umbrela acampanada blanca azulada, bordeada con numerosos lóbulos de color violeta. Tiene 8 tentáculos orales, que forman un manubrio blanco azulado. En su parte media forma una especie de corona con 16 puntas, de cuyo extremo sobresalen 8 apéndices terminados en maza.

La aguamala se localiza tanto en aguas abiertas como en someras. Poseen la capacidad de desplazarse de forma activa hacia las zonas de mayor alimento. Es preferentemente costera, ya que necesitan encontrar sustrato para los pólipos.

Esta especie es común en el Mediterráneo y en el Atlántico, desde finales de primavera hasta otoño. Pude verse en solitario o en grupo.

La peligrosidad de la picadura de la medusa Rhizostoma pulmo es media. Aunque no produce cuatros dermatológicos graves, la picadura de la Rhizodtoma pulmo puede producir irritaciones.

Aurelia aurita

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De la clase Scyphozoa, orden Semaeostomeae, familia ulmaridae.

Su umbrela puede medir hasta 25 centímetros. A diferencia de otros tipos de medusa, la Aurelia aurita, se caracteriza por no ser percibida a simple vista: tanto su tamaño, como su color transparente manchado de blanco azulado, dificultan su visibilidad.

Se puede encontrar en lagunas y zonas costeras y su abundancia es escasa. Su punto de encuentro en el Mediterráneo es en el Mar Menor, pero también en fiordos y bahías cerradas con aportes de aguas continentales.

El nivel de peligrosidad de la medusa Aurelia Aurita es muy bajo. En caso de picadura, los síntomas son muy leves, casi inapreciables.

Velella velella

Vela velella

De clase Hydromedusae, orden hydroida y familia velellidae.

Conocida como “medusa velero” por su peculiar forma. Se trata de una de los tipos de medusas más pequeñas e inofensivas del Mediterráneo. Mide entre 1 y 8 centímetros. Es un hidrozoo modificado con un disco redondo que encierra el flotador y contiene un esqueleto córneo equipado con una vela, cubierta de un tejido blanco. Surge de la superficie del agua para captar el viento y ayudar a la dispersión.

A diferencia del resto de ejemplares, aparecen en enjambres. Son más frecuentes en primavera. No supone ninguna amenaza para el ser humano, ya que los efectos de su picadura son imperceptibles.

Tipos de medusas más venenosas

Chysaora hysoscella

Chysaora hysoscella

De clase Scyphozoa, orden Semaeostomeae y familia Pelagiidae. Seguramente hayas oído hablar de ella bajo el nombre de medusa de compases o acalefo radiado. Su tamaño es similar al de la Aurelia aurita, con un diámetro de la umbrela de hasta 30 centímetros.

Es de color blanco amarillento y sobre su umbrela se aprecia un diseño muy característico, que recuerda al dibujo de 16 compases abierto hacia el exterior. Tiene 24 tentáculos largos y finos que pueden llegar a medir hasta 5 metros de longitud. Además, tiene 4 tentáculos orales fusionados en la base, que generalmente son aún más largos que los tentáculos de la umbrela.

Esta especie es común en aguas abiertas, aunque en verano puede encontrarse algún que otro ejemplar en la costa, arrastrado por las corrientes marinas. Es relativamente frecuente en el Mediterráneo y en el Atlántico.

La picadura de la Chysaora hysoscella es de peligrosidad alta. Causa picor y quemazón al principio e inmediatamente después aparecen lesiones en la piel como eritematosas y edemas. Incluso pueden aparecer verdugones que pueden tardar tiempo en desaparecer.

Pelagia nocticula

Pelagia nocticula

De clase Scyphozoa, orden Semacostomeae y familia pelagiidae. Popularmente conocida como medusa luna. Esta especie se caracteriza por su capacidad luminiscente. El diámetro de su umbrela puede llegar a medir más de 20 centímetros. Por lo que su tamaño es similar al de sus amigas Chysaora y Aurelia.

De umbrela semiesférica, algo aplanada y con cuatro largos y robustos tentáculos orales. Presenta 16 tentáculos marginales que pueden llegar a medir hasta 20 metros de longitud (los más largos vistos hasta ahora).

Toda la superficie de la umbrela, brazos orales y tentáculos está cubierta de verrugas (acumulaciones de cnidocistos).

Su color rosado rojizo permite su fácil localización. Es muy frecuente en aguas abiertas, y también en el litoral mediterráneo, especialmente durante el verano.

La peligrosidad de la medusa Pelagia nocticula también se clasifica como elevada. Causa irritación y escozor, pudiendo dejar una herida abierta con riesgo de infección. Debido a su abundancia y a la longitud extrema de sus tentáculos, la zona afectada puede ser considerable. El efecto del veneno podría llegar a causar problemas respiratorios, cardiovasculares y dermatológicos durante semanas e incluso meses.

Physalia physalis

tipos de medusa carabela portuguesa

De clase Hydrozoa, orden Siphonophora y familia Physaliidae. Como en el resto de especies, seguramente estos nombres no te resulten familiares. Pero sí el de Carabela Portuguesa o Fisalia. Se trata de una de las especies más peligrosas, por su morfología y capacidad tóxica.

De su morfología externa se aprecia una parte flotante (pneumatoforo), formada por un flotador relleno de gas, violáceo y transparente y con una cresta (similar a una vela) en su parte superior que le facilita los desplazamientos por el viento.

Su parte suspendida está formada por multitud de largos y finos tentáculos, encargados de capturar de la captura de presas y defensa. Por lo que están cargados de nematocistos (células urticantes) que cuelgan varios metros por debajo del agua. Como dato curioso: estos tentáculos pueden llegar a medir más de 20 metros de longitud.

Este tipo de medusa se mueve a merced de las corrientes superficiales y el viento. Frecuenta el Atlántico, pero en los últimos veranos también se ha observado en costas del Mediterráneo, en busca de aguas calientes.

La peligrosidad de la medusa Carabela portuguesa es muy elevada, la más alta de todos los tipos de medusas del Mediterráneo. Tanto, que el contacto de sus tentáculos puede ocasionar consecuencias muy graves para las personas. Catalogada como la medusa más peligrosa del mundo.  Contienen innumerables nematocistos con propiedades neurotóxicas, citotóxicas y cardiotóxicas que pueden llegar a causar un shock neurógeno. Un intensísimo dolor se apodera de nuestro cuerpo y puede llegar a producir el ahogamiento.

¿Cómo evitar las picaduras de medusa?

Más vale prevenir que curar, por eso es necesario saber que los protectores solares Safe Sea, también actúan como antimedusas ya que protegen la piel en contacto con medusas y evitan su picadura (Testada en los siguientes tipos de medusas: Pelagia Nocticula, Cotylorhiza Tuberculata (Medusa Huevo Frito), Rhizostoma Pulmo, Aurelia Aurita, Chysaora Hysoscella, Physalia physalis (Carabela Portuguesa), Carydbea Marsupialis (Cubomedusa)). Los protectores solares de Safe Sea no son un repelente de medusas, sino inhibidores. Los ingredientes de un repelente mantienen a los insectos o a los animales en cuestión lejos de nuestra piel. Los seres humanos generalmente atraemos insectos, garrapatas y otros artrópodos por el simple acto de emanar calor y sudor. Los perfumes y las cremas también ayudan a atraer la atención de estos animales.

Para evitar que estos animales permanezcan en nuestra piel el tiempo suficiente como para dar el ‘picotazo’, el repelente forma una barrera en la superficie de nuestra dermis. Esto se logra gracias a activos específicos, como DEET (N, N-Diethyl-m-toluamide), un compuesto químico que confunde los receptores animales e interfiere con su percepción de los olores ambientales. El resultado es un tipo de desorientación, ya que no saben exactamente dónde morder. La duración de esta protección varía según la concentración de DEET utilizada en la fórmula repelente.

La crema solar antimedusas Safe Sea contiene en su fórmula ingredientes exclusivos y patentados, que bloquean las células sensoriales de los tentáculos, justo en el momento en el que se activa el proceso de quema/picadura. Es decir, que, las medusas sí entran en contacto con nuestra piel, pero no nos detectan como una intimidación o presa.

¿Has vito alguna vez alguno de estos tipos de medusas? Y lo más importante aún: ¿Has sufrido alguna picadura?

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