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Leer bien la etiqueta de la crema solar

Leer bien la etiqueta de la crema solar

¿Sabes leer (bien) la etiqueta de la crema solar?


 

Leer bien la etiqueta de la crema solar es muy importante para garantizar la salud de tu piel.  A la hora de comprar un protector solar no basta con fijarte solo en el número de protección que marca. Este es clave, pero hay otros que también debes tener en cuenta para cuidar tu piel al máximo.

Cuando elegimos una crema solar, la mayoría nos fijamos solo en el SPF (factor de protección solar), pero este solo te indica la protección contra los rayos UVB.

La razón es que originariamente se pensaba que la radiación UVA no causaba cáncer de piel, pero ahora se sabe que también aumenta el riesgo.

Todavía hay cremas que no incluyen protección UVA

Por eso es importantísimo fijarte bien en las etiquetas para comprobar que tu crema solar te ofrece una protección de amplio espectro:

  • Frente los rayos UVB que son claves contra las quemaduras solares, pero también frente a los UVA o los infrarrojos. Este seguramente es el detalle más importante a tener en cuenta a la hora de elegir tu crema.

Leer bien la etiqueta de la crema solar

Además de indicar el factor de protección, hay otros aspectos en la etiqueta del protector solar que deberías tener en cuenta cuando adquieras este producto:

  • SPF: es el grado de protección frente a los rayos UVB. El número indica cuánto tiempo podría exponerse al sol una piel protegida sin quemarse, en comparación de una sin crema.
  • Protección UVA: si el símbolo UVA aparece rodeado por un círculo es que cumple la recomendación europea (debe ser mínimo un 1/3 del SPF).Aplicar (bien) la crema solar no es tan fácil cómo parece.
  • Protección infrarroja: indicado como IR, contiene antioxidantes y reflectores de la luz que protegen de estos rayos. Muy recomendado para pieles sensibles.

Busca una protección de amplio espectro

  • Tecnología Full light. Además de protegerte de los UVA y UVB, lo hacen de la luz visible y también frente a los infrarrojos. Estas radiaciones, que representan más del 90% del espectro solar (los UVA y UVB son el 10%), penetran en las capas profundas de la piel y contribuyen a su envejecimiento prematuro.
  • Textura: los fluidos oil-free son idóneos para pieles grasas. Lociones, aceites o sprays van bien para el cuerpo. Los sticks, para el contorno de ojos y labios.
  • Water-resistant: resistente al agua. Quiere decir que tras una inmersión de 40 minutos queda el 70% del valor del SPF.
  • PA: es otra manera de expresar el grado de protección UVA. A más signos ‘+’, mayor protección.
  • Filtro fotoestable: significa que la protección UVB y UVA se mantiene tras una hora de exposición solar.

FÍJATE EN LOS INGREDIENTES

Son clave para saber si el fotoprotector incluye filtros físicos o químicos.

  • Filtros físicos. Los más comunes son el óxido de zinc y el dióxido de titanio.

Si tienes la piel sensible elige un filtro físico

  • Filtro químicos. Son más polémicos. Pueden incluir ingredientes como la oxibenzona y el retinil palmito. Se sospecha que actúan como disruptores endocrinos, aumentando el riesgo de cáncer. En países como Hawái se han prohibido los filtros químicos porque deterioran el entorno marino, sobre todo el coral.

 

QUÉ PROTECTOR TE CONVIENE SEGÚN TU TIPO DE PIEL

  • Depende de tu fototipo: si tienes la piel muy blanca y los ojos claros, usa un SPF50+; si es clara y los ojos castaños, un SPF30; y si piel y ojos son oscuros o ya estás bronceada, un SPF20-15.
  • Precaución si estás tomando fármacos: hay algunos medicamentos (antihistamínicos, antiinflamatorios, diuréticos, etc.) que pueden ser fotosensibilizadores. Si los tomas usa un SPF50+.

LO QUE NO SABES DEL PROTECTOR SOLAR

  • Hay poca diferencia entre factores altos y muy altos. Un SPF15 bloquea el 93% de los rayos UVB; un SPF30, el 97% y el SPF50, el 98% de los rayos UVB.
  • La expresión «pantalla total» no está permitida. Ningún fotoprotector bloquea el 100% de los rayos.
  • Los SPF no se suman ni se dividen. Una crema solar con un SPF15 que se aplica 2 veces seguidas no se convierte de esa manera en una SPF30.
  • Es la mejor crema antiarrugas. Usar a diario fotoprotector reduce un 24% los signos de envejecimiento.
  • La caducidad de la crema solar (y que se indica en la etiqueta) está ligada a la pérdida de eficacia de su protección que, normalmente, pasado un año puede reducirse. Pero no es necesario que tires el fotoprotector que te sobró el verano pasado, puedes utilizarlo cuando ya estés morena o bien como crema hidratante.

 

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